¿Qué sucede cuando los responsables del aclamado League of Legends crean un juego de mesa?... pues exactamente lo mismo que sucedió con la anterior creación de la casa, Mechs vs Minions; una producción digna de un Ferrari para un juego que no necesita tanto despliegue, aunque se agradece (aunque vuestro bolsillo no lo haga).
Estamos ante un juego para jugar 1VS1 donde la memoria y la concentración son primordiales, asi que si sois como Dory, olvidaos (guiño-guiño). El despliegue es muy sencillo, solo consta de un tapete, 7 piedras con diferentes iconos a una cara y dos marcadores para contabilizar los puntos.
Durante la partida los jugadores tendrán que ir colocando las piedras una a una en el tapete central, a la vez que las van volteando (dejándolas ocultas), y las van intercambiando unas con otras. Todo ello con el fin de despistar al rival, y ser tú el único que recuerda la colocación correcta de todas las piedras.
Si crees que tu oponente no sabe donde está una piedra concreta, puedes invitarle a que indique donde se encuentra. Si acierta gana y si falla ganas tu. Ahora bien, si en un momento de la partida crees ser el único que conoce la ubicación de todas las piedras, puedes lanzar un órdago, y el contrincante, en este caso, puede o bien no creerte y pedirte que lo indiques, o por el contrario, decirte que el también lo sabe, en cuyo caso te toca a ti creerle o no.
Lo recomendamos para: trileros no iniciados que necesiten un kit de herramientas para el primer día de clase.
No lo recomendamos para: todos aquellos que no tengan memoria ni quieran ejercitarla. Si en clase eras más de razonar que de memorizar pasa página. O tira de reglas mnemotécnicas…
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