¡𝘔𝘦𝘯𝘶𝘥𝘰 𝘷𝘪𝘢𝘫𝘦𝘤𝘪𝘵𝘰! 𝘝𝘰𝘺 𝘴𝘶𝘣𝘪𝘥𝘢 𝘦𝘯 𝘶𝘯 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦ñ𝘰 𝘣𝘰𝘵𝘦, 𝘧𝘳𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘢 𝘭𝘢 𝘤𝘰𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦 𝘏𝘢𝘸𝘢𝘪, 𝘺 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘷𝘪𝘥𝘢 𝘮𝘦 𝘩𝘢𝘣í𝘢 𝘴𝘦𝘯𝘵𝘪𝘥𝘰 𝘱𝘦𝘰𝘳…
Y así empieza el diario de abordo de esta segunda parte de La Tripulación. ¿Alguna vez habéis oido eso de que segundas partes no son buenas? Pues no es este caso.
En La Tripulación: Misión Mar Profundo se mantiene la misma estructura de juego de su predecesora, el pseudo-tute de toda la vida. Pero el sistema de misiones mejora de manera considerable y se vuelve mucho mas aleatorio permitiendo una gran rejugabilidad una vez terminemos la campaña.
No nos vamos a extender con esta reseña, porque consideramos que no necesita muchas explicaciones.
La primera parte funcionaba bien si os gustaban los juegos colaborativos con un toque clásico y si sois de los que jugabais a las cartas con vuestro padres y abuelos de pequeños. En esta casa se sigue jugando a la pocha y la primera campaña de La Tripulación la jugamos con nuestros padres.
Esta segunda parte funciona igual de bien, añadiendo un grado de dificultad para los que la primera se les quedaba corta.
Por estas razones... ¡Se lleva un Meeplesello de Oro de lo más merecido!
Esta segunda parte funciona igual de bien, añadiendo un grado de dificultad para los que la primera se les quedaba corta.
Por estas razones... ¡Se lleva un Meeplesello de Oro de lo más merecido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario